23 - marzo - 2024

Motosierra previsional

La caída interanual del gasto en seguridad social en el primer bimestre del año equivalió a dejar de pagar 8,9 millones de jubilaciones mínimas, confirmó el Observatorio de Políticas Públicas de la Universidad Nacional de Avellaneda (Undav). En términos de salud equivalió a no comprar 2000 tomógrafos y en educación a suspender el pago de 600.000 salarios docentes. “La única finalidad del gasto con variación real positiva fue la de los servicios de deuda”, afirmaron. Además, según sus cálculos, el valor real de la recaudación tributaria alcanzó su menor valor en los últimos 17 años en el primer bimestre del año. Para la Undav el ajuste no perdurará en el tiempo porque está principalmente sustentado en la licuación generada por la inflación.

 

En el primer bimestre del año se observaron fortísimas caídas reales en prácticamente todas las partidas presupuestarias, “especialmente a causa del fuerte salto inflacionario luego de la devaluación de diciembre”, desglosa la Undav. Si el ajuste se basa en una inflación creciente y suba del tipo de cambio, entonces no es sostenible en el tiempo e “implica mayores niveles de pobreza y desigualdad”, concluye.

 

El ajuste demandó pocos esfuerzos de implementación, “con dejar el gasto en piloto automático”, ya estaba en marcha pues “la licuación sería inminente”, sostiene Santiago Fraschina, coordinador del Observatorio. Para dimensionar, el ajuste real en el primer bimestre del año en relación a igual período del año anterior equivalió en términos de Seguridad Social a 8,9 millones de jubilaciones mínimas, y debe tenerse en cuenta que el total de beneficiarios del sistema previsional en Argentina ronda las 6,3 millones de personas. La magnitud fue enorme, pero no es sostenible en el tiempo, evalúan.

En términos de Salud, el ajuste equivalió a no poder comprar 2000 tomógrafos y en Educación a dejar de abonar el sueldo a 600.000 salarios docentes en el bimestre. La Undav es conocida por realizar este tipo de comparaciones que permiten ponderar el ajuste con ejemplos más tangibles que sumas de dinero en abstracto.

Fuente: Pag 12