Golpazo para el tenis argentino y sudamericano: chau Córdoba Open
El calendario masculino de la próxima temporada no incluye al ATP 250 que se jugaba en Córdoba desde 2019. En su lugar, entra un torneo en España. Las razones del «olvido» a Sudamérica, tanto deportivas como económicas.
Vaya golpe recibieron este viernes el tenis argentino y el sudamericano con la publicación del calendario 2025 de la ATP, confirmando que el Abierto de Córdoba sobre polvo de ladrillo dejará de jugarse y será reemplazado por uno en Mallorca, España, sobre césped.
«Se confirma la decisión de la ATP de sacar un ATP250 a Argentina y a toda la región… De 4 torneos a solamente 3… Sacarle torneos y posibilidades a toda Sudamérica no veo que sea una gran decisión. Una pena», tuiteó Diego Schwartzman, uno de los primeros en expresarse una vez conocida la noticia.
Con la eliminación del Córdoba Open, que tuvo seis ediciones entre 2019 y este año, Sudamérica quedará con sólo tres torneos para 2025, siendo una de las regiones más relegadas por la ATP, justo cuando los petrodólares de Arabia Saudita se abalanzan sobre el deporte de la pelotita amarilla.
Sudamérica albergará entonces en 2025 los torneos de Buenos Aires, del 10 al 16 de febrero, de Río de Janeiro, del 17 al 23 de febrero, y de Santiago de Chile, del 24 al 30 de marzo. Buenos Aires y Santiago son de categoría 250, la más baja de la ATP, mientras que Río de Janeiro es 500, un escalón por debajo de los Masters 1.000, categoría que nunca pasó por este subcontinente.
Córdoba se suma entonces a los extintos eventos que supieron realizarse alguna vez en Viña del Mar (Chile), Bogotá (Colombia) y San Pablo (Brasil), por ejemplo. De sus seis ediciones, cuatro fueron ganadas por argentinos: el local Juan Ignacio Lóndero lo inauguró en 2019, Juan Manuel Cerúndolo dio el batacazo en 2021, Seba Báez se lo quedó en 2023 y este año fue para el geselino nacionalizado italiano Luciano Darderi. Mientras que las otras dos se repartieron entre el chileno Christian Garín en 2020 y el español Albert Ramos Viñolas en 2022.
La Gira Dorada o Golden Swing, como se conoce a los torneos que se juegan en Sudamérica entre el comienzo de temporada en Australia y el arranque de los Masters 1.000 en cemento norteamericano, ha quedado en un segundo plano por razones deportivas tanto como financieras.
En cuanto a lo competitivo, varias raquetas optan por pasar esas fechas en los torneos indoor europeos, como Róterdam (Países Bajos) y Marsella (Francia), antes de viajar hacia Doha (Qatar) y Dubai (Emiratos Árabes Unidos) ya que supone una mejor aclimatación al no cambiar de superficie. Se pasa del cemento de Australia al cemento de Europa o Medio Oriente (contra el polvo de ladrillo sudamericano), antes de volar a Estados Unidos y seguir en pista rápida en Indian Wells y Miami, los primeros Masters 1.000 del año.
Y sobre lo económico, hay nomás que comparar los premios que otorgaron Río de Janeiro y Dubai, dos torneos de la misma categoría. Seba Báez se llevó 392.000 dólares por coronarse en Río, mientras que el francés Ugo Humbert embolsó 550.000 por campeonar en Dubai.
Así las cosas, en 2025, del total de 61 torneos ATP que se celebrarán en el mundo, solo tres tendrán lugar en Sudamérica. Esto contrasta con los cinco que se juegan en Oceanía o los dos que tienen lugar en México. Sólo en Estados Unidos, por ejemplo, se disputan nueve, contando tres Masters 1.000 y un Grand Slam: en Francia, cinco, contando un Masters 1.000 y un Grand Slam; y en China, cuatro.
Junto a África, que solo celebra el torneo de Marrakech (Marruecos), Sudamérica es la gran olvidada del calendario tenístico.
Por el contrario, el continente europeo aglutina casi el 50% de los torneos, con 30 eventos. No casualmente desde 2009 que no hay un campeón no europeo de algún Grand Slam. El último «hereje» fue el tandilense Juan Martín del Potro, en el US Open de 2009.
Fuente: pag12