
El Papa Francisco expresó su preocupación por el crimen del niño de 11 años en la localidad santiagueña de Quimilí
A través del obispo de Añatuya, José Melitón Chávez, y en respuesta a una carta enviada por el padre de la víctima del crimen, Mario Salto, el Sumo Pontífice hizo llegar su participación en el dolor por la muerte de su hijo «Marito».
El Papa Francisco mostró su preocupación por el crimen de un niño de 11 años, que hace más de cinco meses fue secuestrado, violado y descuartizado en la localidad de Quimilí, población rural ubicada a 220 kilómetros al sureste de la capital santiagueña.
«Su Santidad le agradece este gesto de confianza, al abrirle su corazón y manifestarle su preocupación, al mismo tiempo que movido de amor paternal, desea asegurarle una oración especial a su hijo y por todo la familia, para que en todo momento sientan la presencia bondadosa del Señor que infunde consuelo, fortaleza y esperanza”, indica la misiva.
Más adelante, Jorge Bergoglio «invocando la intercesión de la Virgen María, les imparte la implorada Bendición Apostólica, a la vez que le suplica una oración por él y por su servicio a la Iglesia universal».
Para finalizar, el Papa aprovechó la ocasión «para manifestarle los sentimientos de mi consideración y estima en Cristo».
«El mensaje nos da mayor fuerza espiritual, que en realidad es lo único que nos queda para aferrarnos», dijo la docente Marta Salto, tía de la víctima, tras recibir la carta del Papa Francisco de manos del cura párraco de Quimilí, José Vera.
La mujer expresó que «ya pasó mucho tiempo y las investigaciones no avanzan, a pesar de las marchas que se realizan todas las semanas para reclamar justicia por Marito».
En diálogo con Télam, Salto indicó que «tiempo atrás» les informaron que «en octubre se iba a exhumar el cadáver para una nueva autopsia y ahora dan el seis de diciembre como fecha posible, mientras sigue el dolor, la angustia y la incertidumbre por saber quienes mataron al niño».
En el plano judicial, la jueza Rosa Falco de Rainieri sigue a la espera de la exhumación del cuerpo del niño para una nueva autopsia, que estará a cargo de médicos forenses y otros peritos de Gendarmería Nacional a la que la Justicia santiagueña solicitó su colaboración.
En tanto, familiares de la víctima, realizaron hoy la 28 marcha por las calles de Quimilí, en reclamo de «justicia» por el esclarecimiento del crimen cometido hace más de cinco meses.
Con anterioridad y poco antes de enviar la carta al Vaticano, a través del Obispado de Añatuya, el padre de Marito había realizado distintas protestas en las que reclamo «justicia» encadenándose frente a la Departamental 12 de Quimilí y en los Tribunales de Santiago del Estero.
«No voy a parar hasta encontrar a los verdaderos asesinos que mataron a mi hijo, un niño indefenso de once años que recién comenzaba a vivir», dijo el padre de la víctima, peón rural de la zona.
Tras la renuncia del juez natural de la causa, Miguel Angel Moreno, detenido y acusado de una millonaria defraudación al gobierno de Tucumán, el Superior Tribunal de Justicia de Santiago del Estero designó a la jueza Falco de Rainieri a cargo de las investigaciones por el secuestro, violación y descuartizamiento del niño.
Moreno también fue apartado de la causa en la que se investiga el crimen de la empresaria santiagueña Estela López de Auad (58), asesinada de 21 puñaladas hace más de ocho meses, por el cual no hay imputados ni detenidos, en una instrucción judicial que ahora también es dirigida por Falco.
Por el crimen del niño, que el 1 de junio fue hallado descuartizado en un basural, permanece detenido Rodolfo «Rudy» Sequeira (39), acusado del delito de homicidio como «partícipe secundario» del hecho.
El chico desapareció a fines de mayo, cuando fue a pescar en una represa cercana a su casa de campo, y su cuerpo descuartizado fue encontrado 48 horas más tarde en un basural ubicado en el otro extremo de Quimilí.
Fuente: Telam.